Al escuchar el pataleo que formó el amigo
Luis cuando vio en el recibo de la corriente la cantidad de dinero por pagar,
le pregunté, ¿por casualidad tú conoces las vías mediantes las cuales puedes
disminuir el consumo y hacer asequible al bolsillo su costo?
“Claro que sí, compadre; apagando las luces
innecesarias. Y en eso, todos en la casa contribuyen”, respondió, con cierta
irritación, pues según su parecer, el
exceso obedece a desperfectos en el metro contador o a errores en su lectura.
-Tal vez tengas razón, pero antes de formular
cualquier queja debes buscar en la casa otras posibles fugas de la corriente-, le
sugerí.
Lo cierto es que esa falta de visión integral
acerca del conjunto de las medidas de ahorro existentes y la reciente entrada
en vigor del horario normal, en momentos en que la economía nacional enfrenta limitaciones
de recursos y una reducción de los portadores energéticos, en virtud de afectar
lo menos posible los servicios a la población, me animaron a escribir este comentario,
enfocado al uso eficiente de la electricidad, sobre todo en la zona residencial.
Sobre el reemplazo del horario de verano, cabe
aclarar que no es un capricho del Estado Cubano, es una práctica internacional
que asumen muchos países, con el
propósito de optimizar el
aprovechamiento de la luz solar y el consiguiente ahorro de energía.
Durante los meses de inviernos las noches cubanas
son más largas y la claridad del día
dura menos, por lo que el uso de la iluminación artificial tiende a aumentar
y también la generación de electricidad
para poder satisfacer la demanda de los clientes, entre las cinco de la tarde y
las nueve de la noche, espacio conocido
como el Pico Eléctrico.
Tal realidad obliga a buscar alternativas
para reducir la carga de consumo y la alta demanda en ese intervalo de tiempo,
mediante el empleo racional y eficiente del costoso recurso, propósito que se
hace más apremiante en el sector residencial por ser el que utiliza la mayor
cantidad –alrededor del 50 por ciento- del total de la energía que distribuye
la provincia.
De ahí, que sea el segmento con mayor
potencial de reserva de ahorro en el territorio, pues el sector estatal tiene
un plan bien ajustado y resulta sumamente difícil que pueda sobregirarse en el
gasto de la energía prevista, circunstancia que no exime a sus componentes de velar por el acomodo de carga y de aplicar
las medidas instituidas.
Teniendo en cuenta que en la parte privada se
hace más complejo y difícil evitar el
exceso del consumo, por cuanto el ahorro depende de la voluntad de cada
integrante del núcleo familiar, me permito, en aras de contribuir al empeño,
exponer algunas recomendaciones especializadas de gran utilidad en los quehaceres del hogar..
Así pues, deben usarse, lo menos posibles, los equipos en el horario pico, de cinco
a nueve de la noche, emplear vasijas con fondos planos para aprovechar mejor el
calor de la hornilla, apagar la cocina cinco minutos antes de llegar a la
cocción total, momento en el que es preferible situar suplementos de barros que
guardan mayor temperatura elevada.
No planchar ni
conectar turbinas en el espacio antes mencionado, Evadir la utilización de varios equipos a la vez de un mismo tomacorriente, preparar los alimentos antes de
encender los aparatos, usar la cantidad imprescindible de líquido para cocinar,
así disminuye el tiempo de cocción, y evite calentar agua o
cocinar otros alimentos en la olla arrocera, pues reduce su vida útil, entre otras acciones,
dirigidas al aprovechamiento óptimo de la electricidad en la vivienda.
Cuando en el ámbito
doméstico se logre ese objetivo, situaciones como la sufrida por Luis darán paso al ahorro de electricidad y de
dinero, que las familias podrán destinar a cubrir otras necesidades del hogar.
Lo mismo sucedería a
escala del país, pues lo que se obtenga por concepto de la eficiencia energética, se revertirá en beneficios para todos los cubanos, ya que
pueden asignarse recursos financieros hacia otros sectores de la economía nacional
con gran impacto social, como la construcción de viviendas, razones más que
convincentes para que los tuneros digamos UN
SÍ POR EL AHORRO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario